Puede que sí
Pude ser que queme otra vez mis
versos
en el altar del olvido y la
desesperanza
bajo el humo en mis ojos que dan
a las lágrimas
la excusa necesaria parta
llorarlas.
Y no dejar ninguno, ninguna
palabra
que me recuerde tu paso por mi
vida
Puede que me pierda en el camino
de esta niebla de enredo que
nunca me lleva a ti...
Puede que sí...
Puede que piense que el cansancio
y la fatiga
con la que llenaste mis zapatos
de charol de días
de fiesta y de sabor a futuro, y
a esperanza,
me cansaron el alma,
y ya no quiero buscar
sombras de ella disfrazadas.
Pude que piense
que no quiero seguir más tu
camino de espinas
bajo sonrisas de rosas disfrazadas,
y te deje,
te deje andar tu vida ,
y vuelva yo a la mía
sin volver atrás ni siquiera una
de mis miradas.
Puede que sí...
Y puede que ya no te quiera,
-es tan largo el amor, tan corto
el olvido-,
y que el recuerdo se difumine y
que pierda
las noches en las que te amé como
un niño.
Y que el sol se convierta en
nieve eterna,
y que las estrellas en rombos de
espigas
que ya no sueñan...
y que la noche fuera día, y la
luz niebla...
y que no te quisiera
y que ya no te quisiera
amor de luz y pesadilla,
como te quiero en esta mañana de
espera.
Puede que sí...
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