Regreso
Vuelvo
al camino
donde
las piedras y las rosas rozan mis pies
en un
baile de aparente sinsentido
mientras se abre de nuevo en jirones de piel
ávido
de versos desnudos de tu destino.
Y
deberás saber que perdí entre mis quimeras
la
esperanza con la que en horas de mar
inciertas
te soñé
en absurdos cuentos infantiles.
Perdido
el aroma de tu aliento
en mi
desencanto de besos muertos
antes
de que aún fueran carne, y sueño,
desprecio
cuanto creé en ese absurdo espejo
de
despertares rotos, y en tu vacío, vacíos.
Vuelvo
a mi camino
donde
no me alcanzan el eco de tus pasos
ni tus
palabras marchitas de sentido,
ni mi
cariño te alcanza, ni siquiera el
amargo
sabor
de un absurdo tiempo perdido.
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