Esquizofrenia
La noche me mece entre sábanas de sueños acompasados
que entre el silencio acunan deseos evanescentes.
Nada importa. Ni las palabras huecas mordidas
en páginas de papel cuché
en tiempos abandonados,
ni los besos que me diste en el entre luz de la espalda
cuando los puños miraban a las nubes y, ciegos, las desgarran.
Todo está bien. El mundo agoniza y entre aullidos calla.
(Aún suspira alguna gota de
viento que grita
adormecida entre el oleaje inquieto de las duras sábanas).
Pero amanece entre suspiros de aire y grito la mañana…
Despierta. Muere de hambre y de fuego una estrella desgarrada.
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